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Muchas veces me pongo a pensar qué pasaría si hiciese algunas cosas... Quizás ni siquiera estaría hoy aquí, o igual estaría mucho mejor que ahora. La verdad es que cada vez que pienso todo lo que me queda por hacer, todo lo que me queda por delante, me doy cuenta que en el fondo no se nada de la vida, no sé ni lo que me espera ni lo que no quiero esperar. Es muy cierto que muchas veces no sé lo que quiero, supongo que esto les pasa a todos, es por eso que creo que me equivoco tantas veces, me intenté buscar tanto que yo misma me perdí. Muchas personas dicen que odian la hipocresía, pero te das cuenta que de ellas mismas son unas hipócritas, que muchas veces tienes que serlo a lo largo de la vida. Conozco a muchas personas que dicen ser buenas, y después ser esas mismas las que hacen daño. Escuché a muchas personas hablar del amor como el mejor sentimiento y más tarde ellas mismas se daban cuenta de que no sabían de qué iba ese juego. Escuché a muchas personas decirme te quiero y después querer echarme de sus vidas. Ahora es cuando pienso, ¿de quién tienes que fiarte? ¿qué es lo que tenemos que creer?. Sinceramente creo que vivimos con completos desconocidos, que ni siquiera nos conocemos a nosotros mismos. Ahora sí que puedo decir que aquí lo importante en la vida es aprender a vivirla y conocernos a nosotros mismos. Yo sé como: equivocándote, llorando, queriendo, enamorándote, odiando... Y al final te darás cuenta de que lo vivido forma parte del pasado, nunca vas a estar en el lugar y hora correcta si no estás con la persona correcta. Te das cuenta que lo importante de la vida es con quien la vivas, que los únicos sentimientos son los que se llevan por dentro, y que las mejores personas son aquellas que siempre están un poco lejos de ti. Te das cuenta de que los días en su compañía siempre fueron las mejores noches, y que lo que extrañas es lo que de verdad quieres. Te das cuenta de que todo lo perdido que hizo ganas muchas otras cosas, y que no es tan malo, que unas veces se gana y otras se pierde. Te das cuenta de que no sabes decir que no cuando se trata de querer. Te das cuenta de que las cosas que viviste son las mejores y que las que quedan solo son un poco más buenas, que todo lo que pides es aquello que necesitas. Al final te das cuenta de que siempre tuviste lo mejor, que la vida se compone de momentos buenos y malos y que con lo único que te quedas es con las personas con las que los viviste, que lo que eres y serás no puede cambiar por nadie. “Nunca serás una más si alguien donde esté te echa de menos”. Es ley de vida.